31 de diciembre de 2012

A veces despido el año con Vetusta Morla.

Ahora se van a cerrar todas las puertas de golpe. Se acabó, se fue y ya no habrá más. No habrá más que se llamen 2012.
Y como de costumbre se van a abrir de par en par 365 puertas con 2013. Tiene pinta de año mágico, aunque a mí no me guste, para nada. Pero eso es otra cosa.


Y como no me apetece entreteneros más, para nada, porque yo también tengo familia (y un vestido de la S que ponerme). Feliz año nuevo. 


Vetusta Morla - Año Nuevo

27 de diciembre de 2012

Mi apuesta para hoy, 'Up'!

La primera entrada de hoy va dedicada sin duda alguna a la película más bonita que he visto desde hace meses, 'Up'. Si se puede morir de amor, literalmente, es con esta película. Y lo voy a confesar, es la primera vez que la veo, y casi me ahogo con mi propio llanto. Os dejo el trailer para que lloréis conmigo.. Up! 


PD: Conozco a una persona, y no quiero señalar (@SergioDiaz_93) que no vio Up hoy por jugar a la play. Por dios, decidle que la vea, es amor. 

Con las luces encendidas, y las ventanas abiertas.

Últimamente parece que llego tarde a todas partes. Y cuando por fin consigo llegar las luces están apagadas y ya no hago falta. Si supieran lo que me cuesta dar cada paso me esperarían, pero no lo hacen. Todo sigue un ritmo demasiado rápido, y mis pies no están acostumbrados a moverse a ese compás. A ellos el 3/4 ya les parece insufrible. Pero todo sigue acelerando, metéis demasiadas notas en franjas muy pequeñas y eso es lo que pasa, que al final se estropea. Todo se acaba estropeando por no hacerlo bien. A veces creo que hasta la rotación de la Tierra va más acelerada de lo normal. Pero parece que no os importa. A ninguno. O alcanzo vuestro ritmo o cada vez que llegue será tarde. Solo me queda probar una cosa, parar. Frenar en seco y no moverme más, hasta que el mundo deje de estar loco, o yo recupere un poco la cordura. 

Ahora seré yo la que espere, si siempre llego tarde, debe haber alguien detrás de mí también, ¿no? Yo lo esperaré a él. Con las luces encendidas, y las ventanas abiertas, aunque sea de noche. Él va bien. El mundo es el que se ha vuelto loco. 


25 de diciembre de 2012

Cuando me gire entre la gente serás tú. Sí, ya lo verás.

No encontraba otra salida, y me quedé quieta entre la multitud. Todo el mundo tenía prisa, y yo ni siquiera sabía a donde iba. Chocaban conmigo, había demasiado ajetreo y yo solo necesitaba estar sola. Qué buen sitio, soltó mi yo interior con ironía. Lo miré con tal cara de “me da exactamente igual lo que digas” que solo fue capaz de darme una palmadita en la espalda y decirme que todo iba a ir bien, pero siempre con su humor incompresible y sin saber si está hablando en serio o riéndose de mí. 

Me sentía fuera de lugar. Parecía que iba a caer en redondo al suelo, sin consultarles a los demás si les parecía bien. Pero algo me sostenía. Quizás un ende mágico. El lugar cada vez estaba más concurrido y yo me hacía más y más pequeña por momentos. Intenté de alguna forma salir de allí sin éxito. 

Estaba apunto de caer, pero no me apetecía que nadie me viera. Las bolsas pesaban demasiado, y mi cuerpo. Sobre todo mi cuerpo. Cerré los ojos por un instante y pude verme en una habitación a oscuras, sin nada alrededor más que mi entera soledad. Creo que he encontrado mi ninguna parte, no lo recordaba así. Para nada. Qué descuidada he sido. Soy un desastre, aunque no sea nada nuevo. 

En un segundo recobro el sentido común a golpe de grito infante. No sé ni cuantas veces habré dicho que no me gustan los niños. Busco al semejante bichejo con la miraba y veo su rodilla sangrante. Involuntariamente, por instinto supongo, me acerco. No veo a su madre alrededor, ni nada que se le parezca. Saco un paquete de pañuelos del bolsillo derecho del abrigo, me quito los guantes y me arrodillo delante del niño. Le pregunto si está bien, mientras mojo el pañuelo con una botella de agua que tenía entre mis bolsas. Asiente, y le informo de que quizás le escueza un poco. Apoyo mi pañuelo contra su rodilla y espero a que pare de sangrar. Miro al niño, y no sé que decirle. Mi instinto maternal es totalmente nulo. O inútil según se mire. 

Cuando esta ya es capaz de articular sin dificultad, lo levanto y le digo “anda vete con mami”. Me da las gracias, y un tierno beso en el cachete. Supongo que es tierno, o eso es lo que dicen. Lo veo salir corriendo y darle la mano a una mujer mientras me señala. Esta hace amago de darme las gracias también y saludo de forma cordial. 

Me levanto, cojo todas mis bolsas y busco las llaves del coche. Me largo. Me doy media vuelta y de repente estás ahí. Me giré y estabas ahí. Riéndote de mí como siempre. Crees que agachando la cabeza no veo esa picara sonrisa, pero bueno, vamos a fingir que no la he visto. Debería ir a saludarte. Un paso al frente y todo el centro comercial se ha apagado. ¿Qué pasa? Un foco de luz sobre ti hace que sea capaz de verte pero, ¿y todo lo demás? Eres tú, eres tú y tus ganas, susurra algo desde mi interior. 

No quiero echarme a correr, no, no por favor. Lo último que recuerdo es pestañear y estar frente a ti. ¿Y ahora qué? ¿Dos besos? Supongo que es la forma que tiene de saludarse los amigos.¿Besito a papi?” te oigo decir. Y sonrío, claro que sonrío. Asiento, como una tonta atónita. Y cuando iba a darte un beso casto en el cachete, te giraste, como siempre. Y empecé a crecer. Mi pequeña yo, se volvió una gran yo entre la gente. 

Lo sabía. Sabía que cuando me girara entre la gente ibas a ser tú. Sí, tenías que ser tú.

Gracias Santa.


No podías haberlo hecho mejor. 

23 de diciembre de 2012

18 de diciembre de 2012

La comudad del anillo y los cortes publicitarios.

«Tres anillos para los reyes elfos bajo el cielo.
Siete para los señores enanos en casas de piedra.
Nueve para los hombres mortales condenados a morir.
Uno para el «Señor oscuro», sobre el trono oscuro
en la tierra de Mordor donde se extienden las Sombras.
Un Anillo para gobernarlos a todos. Un Anillo para encontrarlos,
un Anillo para atraerlos a todos y atarlos en las tinieblas
en la tierra de Mordor donde se extienden las sombras».



Esta noche toca pese a que cada corte publicitario dure 6 minutos. #GeekyTime

12 de diciembre de 2012

Todos los raros fuimos al concierto.

Hoy he descubierto que me gustaba esta canción. Apareció como de repente en mis cascos. Club de fans de John Boy. 



9 de diciembre de 2012

Estaba sentada bajo la lluvia. En el mismo banco de siempre.

Estoy congelada, necesito que vengas, que vengas de una vez por todas y me abraces, me recojas el pelo y sueltes un topicazo en plan “vámonos a casa”. Lo necesito, de verás que sí. 

A veces vengo aquí porque era nuestro, todo esto. Parecía nuestro. Pero hoy ha sido por pura inercia. No sabía a donde ir, no sabía qué hacer, sentía que iba a explotar, y quería salir corriendo. Y de repente me veo aquí, delante de este banco. Me siento y veo nuestros nombres con compás. Empiezo a temblar. Recorro con los dedos nuestras iniciales y dibujo un bonito corazón. 

Cierro los ojos por un instante y te noto tan cerca, casi puedo oler tu perfume. Inspiro. Noto tu mano subiendo por mi pierna, y tu nariz aproximándose a mi pelo. Te noto, de verdad. No quiero abrir los ojos. Inclino la cabeza y tu fría nariz empieza a deslizarse por mi moflete. ¡Ay, qué frío estás! Como siempre. Me giro y empiezo a notar que tus labios se deslizan cerca de los míos sin llegar a rozarlos. Siempre sabes lo que me gusta. Me muerdo el labio esperando lo inevitable, suspiro y de repente oigo un “¿está ocupado?” Abro los ojos rápidamente saliendo completamente de Oniria y veo a una mujer mayor cargada de bolsas. Asiento atónita e intento ayudarla pero mi cuerpo es incapaz de moverse, parece haberse petrificado. 

Pasan unos minutos hasta que recobro el aliento, que jamás debería haber perdido, y contesto a alguna de las inquisidoras preguntas de la señora. Va demasiado elegante. Si pudiera catalogarla en un estilo pictórico sería el barroco, seguro. Quizás elegante no es la palabra que andaba buscando, ostentosa. 

Oigo como felicita a otras personas de los alrededores sin saber por qué. Aún estoy conmocionada por ese momento tan irreal y espectacular que acabo de vivir. Estaba apunto de… y de repente llegó y me trajo de vuelta al mundo real. No quiero. Me niego. A veces no me explico como soy capaz de abstraerme tanto que ni siquiera oigo el ruido que hay a mi alrededor. 

Llevo mirando al suelo un rato, percibo de alguna manera, quizás mi sentido arácnido, que la señora se va a levantar y que la está esperando el coche negro de enfrente de la calle. Levanto la vista y le pregunto amablemente si necesita ayuda, con una voz demasiado aguda me responde que no, y me sonríe. Me da las gracias, y para cuando me ha felicitado, sin saber por qué, yo ya vuelvo a estar muy lejos de la realidad. 

Me vuelvo a quedar sumida en mis vaivenes, y apago la luz del exterior. ¿Por dónde íbamos? 

Inspiro. Me muerdo el labio, y vuelve a aparecer esa nariz fría rozando mi pómulo izquierdo. Me sonrojo. Me gusta que esté tan cerca, me gusta mucho. Me empieza a dar besitos castos en el cachete tan rápidos como sus labios le dejan. Me hace cosquillas. Qué tonto es, sabe que lo estoy esperando. Empuja con uno de sus dedos mis gafas, y creo oírle decir que parezco una abuelita todo el día con las gafas allá abajo. Me estremezco en el sitio. Me ruborizó aún más. Y mi nerviosismo empieza a ser perceptible a ojos de cualquiera. 

Vamos, hazlo ya.

De repente empiezo a oír un tintineo pero intento que no me saqué de mi mundo. Es imposible. Me noto pesada y ¿empapada? Abro los ojos, y está lloviendo, casi diluviando. No sé cuanto tiempo llevo sentada aquí. Las luces están encendidas, y no veo a demasiada gente en la calle. No me quiero ir. Quiero acabar mi historia. Este no puede ser el final. 

Intento evadirme otra vez por completo pero resulta imposible, tiemblo demasiado. Mi abrigo está empapado. Me levanto e intento meterme en el recinto más cercano. Como no parece haber ninguno abierto, me resguardo con los salientes del techo de un edificio. Busco el portal para sentarme hasta que la tormenta amaine y pueda irme a casa. Llevo demasiado tiempo haciendo la tonta. 

Encuentro la entrada del portal casi sin esfuerzo, y me siento a la entrada. Intento entrar en calor frotándome las manos, pero creo que incluso los guantes se han mojado. Estoy calada hasta los huesos. 

Sin ser consciente de ello el cansancio comienza a ser el portavoz y los parpados hacen lo que éste le ordena. He entrado en calor sin saber como y me encuentro bastante cómoda. No sé si estoy soñando. Pierdo la noción del tiempo. Estoy dormida en un portal cualquiera y no me importa. 

Noto un hormigueo en mi cara, no sé como llamarlo, es reconfortante, me gusta. No quiero abrir los ojos por miedo a que se acabe. Quizás esté soñando otra vez. Empiezo a pestañear y lo veo. Salto interiormente, creo que exteriormente también, y me despierta con un “¿qué haces aquí sola?”. No sé qué decir. ¿De dónde ha salido? ¿Dónde estaba? No lo había visto hace demasiado tiempo. Intento contestar, pero es inútil. Hoy mis cuerdas vocales están de huelga. Pongo expresión de incredulidad y me ayuda a levantarme. No sé a donde vamos, aunque tampoco me importa. 

Y volvemos a estar aquí. En el mismo banco de siempre. La lluvia ha cesado. No consigo decir nada. Se acerca a mí, y noto la punta de su nariz helada en mi cachete, creo que he empezado a temblar, posa su mano sobre mi muslo y con voz entrecortada creo oírle decir “te echaba de menos”, aunque no estoy segura. Se desliza hasta mis labios, por fin, y me besa. No puedo evitar responderle más que con otro beso. 

Coloca sus dos manos en mi cara y empieza a apretarla contra la suya, estamos muy cerca, más de lo que podía haber vuelto soñar nunca. Sonríe. Sonríe mientras me besa. Y le devuelvo la sonrisa. 

Se aleja por un momento, lo suficiente como para poder mirarlo de frente. Tiene los ojos rayados, o yo estoy delirando de la emoción. Paso mis manos por sus ojos y sin dejar de agarrar mi cara, hace que le mire y me dice “Feliz Navidad”.

4 de diciembre de 2012

Schrödinger’s cat.

Hi, I’m Thais and I’m going to tell something about me.
I've always been afraid of change, until I heard the story about “Schrödinger’s cat”.

In 1935, Erwin Schrodinger, in an attempt to explain the Copenhagen interpretation of quantum physics, he proposed an experiment where a cat is placed in a box with a sealed vial of poison that will break open at a random time. Now, since no-one knows when or if the poison has been released, until the box is opened, the cat can be thought of as both alive and dead.

Maybe you can’t understand what I wanted to say. Just like Schrödinger’s Cat, “the change” right now can be thought of as both good and bad. It is only by opening the box that you’ll find out which it is.

I hope that you have understood what I have said. I can’t be afraid of something, called change, if I haven’t tried these things.

Now I will always need to open the box.

Blancas o negras.

Me dedico a escribir notas en sucio y esto es lo que pasa: 

"Me llamas cuando incluso la Luna ya ha caído. No te entiendo, para nada, deja tu ebria pronunciación y hazme entender qué quieres de una vez.
¿Y si te necesito? ¿Me vas a reprochar haberte convertido en el rey del tablero?
Solo avanzas o retrocedes a pasos contados. Con pies de plomo. 
Ahora estoy frente a ti. y no sé si has elegido blancas o negras. 
Te toca mover, estoy temblando, a un golpe de derribar mi única defensa o de aliarte conmigo.
Voy a caer, lo sé.."



PD: ¿Qué ha pasado?

25 de noviembre de 2012

Relatos sin título previo. (Parte II)

Voy a decorar este lúgubre lugar. Sé que nadie lo verá, pero me sienta bien. Quizás estas paredes empiecen a desvanecerse de alguna manera. Me acerco a una caja gigante que ha salido de ninguna parte y empiezo a sacar ¡adornos de navidad!

Qué raro, las luces están enredadas. Son redondas de colores tenues. Las cuelgo alrededor de la pared, sosteniéndolas con los bloques más sueltos. ¡Qué bonitas! Por alguna extraña razón están encendidas sin haberlas enchufado yo, tampoco voy a molestarme en saber el por qué bastante hago con mantener la cordura en este sitio de locos.

Cojo la caja, y la llevo a la zona más iluminada. No pesa, no pesa nada. ¡PERO SI ESTÁ LLENA DE COSAS! ¡VÉIS QUE ESTO ES UN SITIO DE LOCOS! Saco un árbol de Navidad. No un arbolito de plástico de metro cincuenta, no, un abeto enorme por el que se podría trepar… Ya viene perfectamente adornado, como si hubieran cogido un recorte de una revista de decoración y lo hubieran hecho realidad. Incluso la estrella ya está. Jope, si es lo más que me gusta colocar.

Cojo los dos calcetines de Papá Noel que contiene la caja (¿DOS?), y miro dónde los puedo colocar. Ni un solo cuelgafácil en esta enorme mansión de miedos. Trazo con los dedos un cuelgafácil dónde me gustaría colgar los calcetines, me doy la vuelta para ver que más queda en la caja y ¡ZAS! están ahí. Colgados perfectos, listos para ser usados. Sonrío con incredulidad, aunque realmente no sé de qué me sorprendo, y coloco los calcetines.

Quedan unos paquetes de regalo falsos para colocar al pie del árbol, y una nota. La leo y pone: “Para salir, solo tienes que volver a entrar.” Vaya, ya estamos con los acertijos. Llevo mil días encerrada aquí, quizás no tantos, y lo único que se le ocurre a quien quiera que sea es ponerme una nota indescifrable. Me siento en la silla, en la primera silla que apareció de la nada en este lugar y releo la nota.

De pronto, una melodía familiar empieza a sonar. Después de todo este tiempo, oigo unas notas acompasadas que hacen que me levante y me suba encima de la silla para intentar oír mejor.

“Dos espejos frente a frente crearan, cien mil caras que observar, puede que alguno de ellos sea el real, lo tendré que investigar…” ¡Es Universos Infinitos de Love of Lesbian, la reconozco! ¡Claro que la reconozco!
No creo que esté de casualidad. Tiene que ser por algo. Vuelvo a coger la nota, le echo un vistazo y mientras sigo escuchando la letra. Salto de la silla y corro hacia la pared, la pared gigante e “indestructible”. Empiezo a quitar las piezas sueltas, esas que disimulé con las luces de Navidad. Todo parecía más bonito decorado. Pero es mentira, todo, todo es una gran mentira. No por tapar la realidad va a desaparecer. Sacó bruscamente una de las piezas y veo que con ella caen muchísimas más.

Examino detenidamente el trozo que tengo en la mano y con letras mayúsculas pone MIEDOS. ¡Eso es! Mis miedos… TODO, absolutamente todo esto lo han formado ellos. Lo he creado yo. Soy la princesa del reino de los miedos, síganme a la derecha podrán ver… ¡PARA! Sabes que esto solo lo puedes arreglar tú. Estoy cansada de tu estúpida dependencia. Sé valiente de una vez por todas. Acaba ya. Hazles desvanecerse de una vez. Se han hecho débiles en el momento en el que te has dado cuenta que no por taparlos van a desaparecer, se han hecho débiles en el momento en el que han sabido que eres más inteligente que ellos. Demuéstraselo.

“Para salir, solo tienes que volver a entrar.”

¡Dales la vuelta! ¡Dales la vuelta de una maldita vez! ¡Haz que actúen en tu beneficio! ¡Haz que estos mil días acaben de una vez por todas!

Y de repente lo vi claro solo tenía que cerrar los ojos y… ¡Regresé! ¡Regresé al principio! Al borde del abismo, con las mismas dos cuerdas que me sujetaban haciendo amago de desaparecer, pero esta vez fui más rápida que ellas, las corté y mientras caía me construí las alas para salir. Y nunca llegué a tocar ese fondo infernal, plagado de minutos que parecen horas, de horas que parecen días, y de mil días que parecen una noche eterna.

Relatos sin título previo. (Parte I)

Estoy al borde, al borde de este abismo. Miro hacia abajo y no consigo ver absolutamente nada. Me sostienen dos cuerdas finísimas, como si de un títere se tratara. Y de repente, y sin previo aviso, las cuerdas desaparecen y me precipito sobre el más oscuro vacío.

¿Hola? ¿Hay alguien? Un eco estruendoso invade el lugar. No sé cuánto he caído, pero estoy en el fondo, en el fondo de ninguna parte. Enciendo una cerilla, que ni siquiera sé de dónde ha salido y empiezo a caminar. La luz solo es capaz de iluminarme a mi. Intento buscar un halo de tecnología en este sitio, y nada. Estoy apunto de quemarme. ¡Mierda! Mira que lo dije. Se apaga la cerilla y vuelvo a quedarme a oscuras. Parece que mi vista se está acostumbrando a esto. Más cerillas emanan en mi bolsillo, sin saber por qué. Enciendo otra. Sigo investigando este lúgubre lugar y ¡PUM! me choco contra una pared negra. Una pared ovalada. Estiro la mano que me queda libre y empiezo a buscar el fin de la dichosa pared. Llevo minutos buscándolo, creo que estoy dando vueltas en círculo. ¡Es un círculo! ¡Es un círculo enorme!
De repente un foco enorme se enciende en medio del lugar, hay una silla en medio. Sé que es el centro por el reflejo que provoca el estúpido foco de luz blanca procedente de ninguna parte. Voy hacia la silla, y me siento. Las cerillas han desaparecido. Parece que este maldito lugar intenta ayudarme de alguna forma extraña e incomprensible.
¡Ya sé donde estoy! Tanto tiempo aquí y no me había dado cuenta, estas paredes, o pared gigante oscura, esas cerillas “mágicas”, y toda esa falta de tecnología.. BUH.

Me desgarro en llanto atroz y no puedo contener mi cara de horror. Veo como la pared aparentemente perfecta empieza a formar bloques, bloques de todos los tamaños, pequeños, grandes, irregulares... ¡Vais a volverme loca! Chillo, y sé que no tengo fuerzas para salir de aquí, porque en algún momento hubo alguien que me sujeto, y no dejó que cayera.

He decidido que me voy a quedar aquí abajo durante un largo tiempo. Tendré que acomodarme entonces.

-----

Me estoy volviendo loca. No puedo más. Llevo mil días, quizás no tantos, aquí sola. No he tenido ni la más mínima noticia del exterior, y cada vez que miro a mi alrededor parece que estas paredes no van a desaparecer nunca, siguen creciendo sin medida. ¡PARAD! ¡PARAD HE DICHO!

Parece que por cada piecita que se coloca, a modo de tetris, yo me debilito más y más. Sé acabo. Esto es culpa mía. Esto lo he creado yo, y tengo que ser capaz de destruirlo. No sé cómo, ni cuánto tardaré, lo único que sé es que lo haré.

-----

Sin título previo.

Me dedico a realizar trabajos en las madrugadas de los sábados y claro no pueden salir cosas coherentes por ninguna parte. Aún a sabiendas de estas, los termino y clicko en enviar sin mirarlo dos veces. Cómo a mi me gusta molestaros mucho, las próximas dos entradas van dedicadas a mi relato de navidad, sin título previo.  



22 de noviembre de 2012

Los días no vividos.

Hay situaciones que no van con ella, para nada, y se siente confundida y no sabe si lo está haciendo bien. Tener la cabeza a dos cosas nunca ha sido malo, si una de ellas es una función vital. Me basta mirarla de un vistazo para saber que no sabe qué tiene que hacer. 
¿Y ahora qué? Sigue con explicaciones que no le piden, y dándole vueltas a treinta mil cosas por segundo. En el fondo sabe que tiene razón. Él siempre tiene razón.


Firmado: Los días no vividos.

16 de noviembre de 2012

Dormida, insomne. (Parece un título de Love of Lesbian.)

Pequeña. Dormida. Frágil. 
Apunto de volar.
Pequeña. Insomne. Frágil.
Apunto de romperse en mil pedazos.


Voy a quedarme en la más lúgubre oscuridad, 
y cuando sea mi momento de resurgir, 
volveré a modo de luz demasiado intenta. 

Apaga la luz al salir.

Me voy a quedar aquí abajo una buena temporada. 
Solo necesitas saber que estoy para ti. ¿Me ves?
Puedes venir siempre que quieras. 
Lo único que tienes que hacer es lo que pone el cartelito de la entrada. 


"Apaga la luz al salir."

14 de noviembre de 2012

Cancioncillas de gustos particulares para daros las buenas noches.

Hay días que no soy capaz de enlazar dos frases con concordancia. O quizás también influya la hora que es. Creo que debería irme a la cama, pero no sin antes daros las buenas noches, y dejaros una cancioncilla (os prometo que no es de Love of Lesbian, no hasta dentro de unas horas al menos) que me encanta. 


Good night, somebody that I used to know.

11 de noviembre de 2012

Tres menciones inesperadas.

Es la típica mañana de domingo sosa y aburrida. No hay nada nuevo en la tele ni en Facebook, más que invitaciones a esos espantosos juegos. Curioseo mis interacciones de Twitter con la esperanza de encontrar algo nuevo, y de repente tengo tres menciones de @titsa. Las leo extrañada, y se me ocurre hacerles una entrada de agradecimiento por la publicidad que le han hecho a mi blog. 


Ha sido tan raro y a la vez tan gratificante saber que ¡COMPAÑIAS!, o por lo menos quien maneja el Twitter de titsa me lee, que no creo que se merezcan menos. 

Muchísimas gracias, y por supuesto esta entrada es para vosotros. 

PD: Por cierto que sepáis que ahora soy una #BloguerGuagueante

10 de noviembre de 2012

No tengo ni idea de nada.

Es sábado. Es el segundo sábado de noviembre y estoy sentada encima de la cama, con las piernas cruzadas y el ordenador encima, replanteándome cuán de asqueroso y tedioso es el trabajo que me han mandado. Lo peor de todo es que estoy bloqueada, y un sin fin de información no deja de aparecer en la pantalla hablando de la energía mareomotriz y sus estúpidas variantes. 

"La energía mareomotriz es la que se obtiene aprovechando las mareas, mediante su empalme a un  alternador se puede utilizar el sistema para la generación de electricidad, transformando así la energía mareomotriz en energía eléctrica, una forma energética más segura y aprovechable. [...]"

No me gusta, no me gusta para nada. No elegí el tema. Era pescado o pescado. Ya no había carne, ni pasta. Encima creo que al final tengo que saber algo. Y ese 'algo' lo podemos mirar desde el punto más relativo que mi mente es capaz de alcanzar. ¿Algo acerca de qué? ¿De la energía mareomotriz? ¿De las renovables en general? ¿Del funcionamiento de las centrales? ¿De por qué pasan los días y lo más divertido que hago es quejarme de mis tareas pendientes? Creo que debería seguir y replantearme mi mala técnica de estudio, al fin y al cabo es como las mareas, el único pero es que cuanto más se acumulan menos energía tengo. Vaya, creo que es totalmente contrario.. 

Voy a acompañar el momento de bloqueo con una canción, y una conclusión final de mi 'hasta ahora'.



No tengo ni idea de nada. 

Love of Lesbian como efecto malo y necesario.

Creo que no es tan buena idea que Love of Lesbian me invada la mente. No en este momento, y no a esta hora. Creo que es la peor decisión del día. No sé cómo lo hace. No sé cómo es capaz de bombardearme con tantas letras tan incompresibles que llegan a resultar obvias. Para ya. Para, por favor. 


Y lo peor es que todo está a un STOP de reproductor. Y mis manos no son capaces de hacerme caso. Quizás sí quiero que sigan causando ese efecto en mi, tan malo como necesario. Por el momento, sigue sonando "mi personualidad". 

1 de noviembre de 2012

Esta maldita conexión.

A veces no me explico lo desatenta que soy. Llevo un montón de tiempo sin escribir de manera regular en el blog y ni siquiera me digno a daros una explicación. Supongo que no todos, pero algunos de mis lectores, y seguidores de Twitter, sabrán que tengo mi portátil averiado, y quien dice averiado dice muerto. Bueno, entre eso, y mi búsqueda fallida de un portátil nuevo estoy "a ver qué me prestan". He pasado por netbook, sobremesas y demás cacharros infernales desde los que actualizo mis redes. 
Creo de alguna forma, que os debo un par de fotos sobre mi viaje. O por lo menos mi gran y esperada foto de Starbucks.


[Yo con mi primer chocolate con nata de Starbucks, que no sabe para nada a polvo y agua]

Os pondría un par de fotos más, pero creo que esta conexión a la red no está dispuesta a hacerme el capricho. Ya os iré colando alguna de mis fotos en los posts. Un besito desde un lugar muy muy lejano.


31 de octubre de 2012

Y de repente una mala definición se convierte en una entrada sin relación aparente.

Miedo
  1. Sensación de alerta y angustia por la presencia de un peligro o mal, sea real o imaginario.
  2. Recelo de que suceda lo contrario de lo que se espera o desea.
  3. Miedo cerval, miedo atroz o excesivo.
[vía: wordreference.com]


Quizás sea algo de eso.. Sí, tiene que serlo. No hay otra explicación. No por ahora, no para mi..

29 de octubre de 2012

Feliz cumpleaños princesito.


(Quizás va un poco tarde, pero este tipo de publicaciones son las imprescindibles, en un blog como este, en un blog para ti.)

22 de septiembre de 2012

Se parará para nosotros.

No sabía en absoluto como afrontar la situación. Tenía la tonta idea de que el mundo se le iba a venir encima. Estaba pidiendo a gritos un abrazo infinito y un beso fugaz para siempre. Estaba reclamando atención, lo necesitaba. Los días le parecían semanas, semanas de 19 días y 500 noches. No pararía de echarlo de menos hasta que pudiera verlo desde lejos y echarse a correr para alcanzarlo, y recuperar esa semana perdida. Sabía que ese momento que tanto añoraba llegaría, llegaría de un momento a otro y entonces, entonces volvería a sonreír como si no hubiese mañana. Y que en ese preciso instante el tiempo se pararía. Se pararía para ellos. Se parará para nosotros.

Las celebraciones obligatorias. (Aunque yo le cambiaría el título).


Dándose a entender que la gente necesita fechas señaladas para demostrar su admiración hacía sus seres queridos, ya sea madre, padre, pareja, y/u otros familiares hemos llenado el calendario de fechas totalmente superfluas. Tenemos con nosotros ya, una cantidad desmesurada de estas y se podrían definir como obligatorias en algunos casos. Días como el del padre, el de la madre, el de San Valentín, que por cierto creo que ya lo quitaron del santoral, avíseme si vuelve, el del abuelo y muchos derivados, son fechas, completamente frívolas. ¿Necesitamos realmente señalar un día para mostrar nuestro afecto? ¿No es preferible acordarte de un ser querido, porque sí, porque lo quieres y no te hace falta marcar un día en concreto?
Dejando a un lado días como el de la Paz, las fechas históricas, como el 23f, y derivados que no presentan ninguna demostración, material a otra persona, centremos en días como el de mamá y papá.
A todos nos parece muy bonito cuando el niño sale del colegio con un regalito manual para papá o una flor para mamá, pero ya se ve, desde pequeños que los están educando para que si ellos quieren a una persona deben demostrárselo a base de regalos. ¿No es preferible antes de salir a cualquier parte, ir a darle un beso a mamá, o a papá, o a el abuelo porque te sale así, natural, porque quieres, y es un afecto diario, y que no se olvida?
Sinceramente de esta “mala educación”, quizás un poco fuerte la expresión, sacan muchísimo partido los centros comerciales. Ese momento en el que entras en unos grandes almacenes por San Valentín y ves todo con corazones rojos, y a un lado “para él” y al otro “para ella”. Pues yo, prefiero darle un beso a mi pareja, pasar el día sentados en un parque al aire libre, que estar con un tropel de rosas de un lado para otro, para que lleguen todas marchitas por el calor abrasador que hace desde el coche hasta la casa del susodicho.
Respecto a mamá y papá tres cuartos de lo mismo, incluso creo que peor. ¿Qué pasa con el niño que no tiene padres? ¿O solo uno? ¿Y el que tiene un tutor/a? Verdaderamente hay niños que se sienten mal cuando preparan esos regalos, porque no tienen esa persona física a quien dárselos, o se sienten mal sencillamente por el hecho de no presentar ese afecto a uno de los padres, y parece que ellos son monstruos. (Y los monstruos son ellos.) Con respecto a cuando vas creciendo el amor parece efímero y solo capaz de demostrarse en tales días. Yo no necesito un día para regalarle nada a mi madre, si me apetece comprarle un detalle, para que se sienta valorada, ¡estupendo! pero no porque ciertas personas se hayan inventado tres o cuatro fechas para incentivar el consumismo. Aunque en realidad sea contradictorio “se lo compro porque me apetece” ¿y por qué comprarle algo? ¿Ya no nos basta hoy en día con un abrazo? ¿O con una taza de té y una buena tertulia para saber como va todo? ¡Qué hay veces que vivimos en la misma casa y somos extraños!
Educamos a una sociedad consumista, y después nos quejamos de que si la felicidad y el valor de las personas se mide por las pertenencias, y la calidad, y cantidad de regalos que podemos ofrecer a los demás. Nos quejamos de la crisis, el paro, las campañas publicitarias excesivas y el llamado spam, pero a ninguno nos desagrada recibir regalos. Tenemos que aprender a formar personas capaces de decir sobre que es lo que quieren hacer, si son ellos mismos, por propia voluntad, quienes desean hacer esto o lo otro.
Dejo de andarme por las ramas, y para concluir mando un saludo a todos los centros comerciales porque se acercan el día del Padre y de la Madre y no veáis las colas que se van a montar para comprar regalitos, bueno aquí tenéis una que no va a hacerlas.

Relación entre el Lazarillo de Tormes y la actualidad.


Apreciar que el Lazarillo de Tormes, en la época en la que fue escrito (XVI), no iba a estar tan descaminado en la actualidad, resulta paradójico.
El Lazarillo de Tormes era como cualquier niño explotado, de hoy en día, en una fábrica haciendo calzado N*ke durante toda su juventud. Privarles de la enseñanza y de sus derechos no es cosa nueva. Lázaro, sin comida y a lo loco, se ponía en manos de cualquier persona "que lo pudiera mantener", para subsistir. Hoy por hoy, queramos o no, en cualquier país en vías de desarrollo, porque subdesarrollado suena feo, podemos apreciar este comportamiento. Aunque el ser humano a pretendido desde hace algunas décadas crear al humano-maquina, sin quejas y con una alta producción, que es lo que todos los empresarios desearían, por desgracia para ellos, tenemos todos un defecto, ser personas, y tener necesidades.
No se darían actualmente casos como los de ir a vender agua o guiar a un ciego, no por lo menos con una mentalidad occidental como la mía, pero sí el trabajar al servicio de alguien y no tener la remuneración correspondiente, quizás incluso llegando a sentir, dichas personas o humano-maquina como se les trata, alienación.
Que el hombre oculte, por vergüenza, la palabra esclavitud, y que se haya proclamado su abolición como tal, parece un hecho surrealista, ya que apreciamos todos los días, que las grandes fábricas de Oriente, privan de una alimentación y sueldo a esos trabajadorcillos, también llamados niños.
No podemos hacer nada con las leyes de dichos países, y mucho menos intentar imponer nuestras creencias en culturas que ni siquiera tenemos el suficiente conocimiento de ellas para criticarlas. Pero existe la conocida “Declaración de los Derechos Humanos” en cuyos artículos cuatro, cinco y veinticinco recogen estas palabras.. “Nadie estará sometido a esclavitud ni a servidumbre, la esclavitud y la trata de esclavos están prohibidas en todas sus formas. Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes.” “Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud, el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médico.” Ahora bien, y sabiendo que dichos Derechos están redactados en 1948 en París, y que el pobre Lazarillo aquí parece no tener vela, deberíamos pensar todos por un momento, la doble moral impresionante que tenemos, al ser capaces de aceptar esto por escrito y no llevarlo a la práctica. Todos tenemos derecho a ser tratados de igual modo, indistintamente de tu procedencia, creencias.., también recogido en los Derechos Humanos en el primer y segundo artículo. Y así podría seguir, pero el articulo 28 de esta Declaración es el más, ¿difícil de cumplir? Bueno, con nuestra doble moral sí, y sí, me incluyo porque mientras yo estoy redactando estas lineas en mi fabuloso portátil de 15.6'' (pulgadas), un niño hace cuatro años estaba encajando piecita a piecita este ordenador. O supervisando desde las 4 de la mañana que todas las maquinas funcionasen correctamente para hacerlo. Bueno, el dicho artículo dice, “Toda persona tiene derecho a que se establezca un orden social e internacional en el que los derechos y libertades proclamados en esta Declaración se hagan plenamente efectivos.”
Observo, que todos debemos creer que esto sería en un mundo utópico, ya que el llevarlo a la práctica parece que no va con nosotros.

12 de septiembre de 2012

Cosas de tías. (Parte II)

Y como os prometí, sigo explicando o desvelando esos secretos o intringuilis de la mente femenina. Hoy toca una "random collection", me explico. 
He llegado a observar que los tíos en general hay cosas que no pillan sobre las tías, sobre todo algunas frases típicas o conversaciones. Por eso hoy toca una entrada explicativa de todo eso en lo que columpiáis un poco. Empecemos. 

A la pregunta.. "¿esa chica te parece guapa?" Hay NO DOS, sino TRES posibles respuestas. 

Respuestas: 

  1. Sí. (Respuesta errónea)
  2. No. (Respuesta errónea)
  3. Sí, pero tú me pareces más guapa, a mi y a todo el mundo seguro, jaja. (DIN, DIN, DIN, DIN, ¡PREMIO PARA EL CABALLERO!)
Si una chica pregunta a su novio (u otro chico) si una chica es guapa, es porque ella la considera así, y por lo tanto, decir solo sí, hace que la tía que pregunta, piense que es más guapa que ella (la otra chica), y que la preferirías físicamente. Por lo tanto consideraremos esa respuesta como errónea. Decir que no también está mal, porque como ya he dicho "ella ya sabe que la otra es guapa" y pensará que lo dices para tenerla contenta y ya. Por lo consiguiente la ideal es la respuesta número tres. De eso no cabe duda, y seguro que ninguna chica rechista por ella.

Seguimos con preguntas de chicas.. "¿me ves guapa?" 
¡OJO EN EL MOMENTO QUE UNA TÍA DICE ESO! 

Suele significar dos cosas: 
  1. Que se siente bajerillas, y no se ve guapa ni atrativa en absoluto.
  2. Necesita piropos, y mimitos. (Normalmente producido por el primer significado)
Por lo tanto la mejor respuesta es un abrazo seguido de un "¡por supuesto!" o de un "¿cuándo no has estado tu guapa?" Acto seguido de esto, la tía sonríe. FIJO, FIJÍSIMO. (Y si no, os invito a una caña.)


Otro punto importante:

¿CUÁNTO OS CUESTA A VOSOTROS DECIR "TE QUIERO"? 
(Y lo pongo en  mayúsculas, negrita y subrayada)


Me refiero a decir "te quiero" en una relación madura y consolidada. Las tías necesitamos sentir ese cariño especial, que alguien al que TÚ MISMA QUIERES TANTO te responda con lo mismo, y de sorpresa. 
Las tías no pedimos ¡TREINTA TE QUIEROS DIARIOS!, solamente uno en el momento más oportuno. Pero al menos una vez por semana (¿lo entendéis?). Las tías de por sí, somos inseguras, insegurísimas, por eso necesitamos ese "apoyo moral" de "te quiero a ti, y no me importa decírtelo porque es lo que siento".
¡QUE SÍ, QUE A NOSOTRAS MISMAS NO NOS GUSTAN LOS TÍOS EMPALAGOSOS, PERO TAMPOCO QUE PASEN DE TODO! ¿ME ENTENDÉIS? No sé si me explico, aunque seguramente si esto lo lee una tía lo coge a la primera. (No es por ofender, es que soy una tía explicándoos cómo pensamos. Lo estoy haciendo de la manera más fácil y "viril" posible.)

Bueno en conclusión, sed ñoños sin serlo, ¿OK?

Pues a otra cosa mariposa. 

Por último, y no por ello menos importante, (y paro porque la entrada se me está extendiendo mucho), existe un tema, bueno una forma de pensar algo "peculiar" en nosotras y es eso de "los celos". 

No pedimos para nada en absoluto que un tío sea celoso. (¡TODO LO CONTRARIO!) Lo único que queremos sentir, es que si "alguien" se pasa con nosotras, es que tenemos a "ese fiera" ahí para sacar las garras por nosotras. Y normalmente cuando no sentimos esos "celos" (sin ser celos) de nuestro chico a nosotras, intentamos picarlo, para que diga algo. Perdón por la expresión que voy a soltar ahora pero.. ¡A NOSOTROS SE NOS HACE EL C*ÑO "PESICOLA" CUANDO HACÉIS EL AMAGO DE DEFENDERNOS! Y no hay más, es así. Nos encanta sentirnos PROTEGIDAS y saber que os tenemos ahí. (Y ESTO HACE QUE SEPAMOS QUE NOS QUERÉIS SIN DECIRLO.)

Conclusión: Celos sin celos = ¡PROTEGIDAS! (Así como las compresas) 


Bueno.. espero que estos cuatro puntitos de hoy os sirvan para algo. Supongo que ya haré en algún momento la parte II de entender a las tías vía web, y la parte III, de entender a las tías vía tiempo real y en directo. ¡Buenas noches a todos y un besito enorme de vuestra traductora particular!

11 de septiembre de 2012

Yo de mi ya no soy rubia.


[Aquí tenéis una foto de la autora de este blog con su pelo ya no rubio]

A modo de cuchara.

Ayer puse un tweet, un tanto así: "Soy fan de los besitos de buenas noches, de buenos días y de las "cucharas" para dormir. Soy fan de las noches contigo."
Creo que es la forma más breve en la que he redactado una entrada completa de mi blog. Entre ñoñerías y adornos se me van mil párrafos para que al final el mensaje sea una frase, una frase tan clara y concisa como lo es esa. Claro, para quien la entienda.
Anoche, era una de esas noches en las que me apetecía escribir, hasta empalagarme, pero hoy no se me ocurre ningún buen texto romántico en el que yo misma diga "OLÉ, Puke Rainbow estaría orgulloso". Pues no, pero sentía la necesidad de comunicar mediante una bonita forma, o una forma como esta, lo mucho que me gustan las noches contigo. Las noches en las que puedo sentir que estás ahí, tan cálido, tan protector y tan frágil a la vez. Las noches en las que al fin puedo decirte "buenas noches", darte un besito de esos fugaces, y dormirme a modo de cuchara porque sé que estás ahí. Y lo mejor, lo mejor de todo es saber que al abrir los ojos, independientemente de si estoy girada para ti o no, va a ser sentirte. Sentirte taaaaaaan cerca, y despertar a modo de comedía romántica, en la que aún te veo durmiendo. Y te miro. Y me notas, y extiendes tus brazos para acogerme y pegarme a ti. Y seguir durmiendo. Para repetir una y otra vez, una de las mejores cosas que puede haber, dormirse y despertarse mirando a la persona que más quieres, y que te hace feliz con solo estar ahí.


[Esto es a modo de cuchara]

6 de septiembre de 2012

Entender a las tías vía web.

¡Buenas pequeños lectores de mis mini-cursos para entender a las tías! Hoy hablaremos de "cómo entender a una tía según los emoticonos que use". Este campo sigue siendo un GRAN tema desconocido para vosotros a no ser que UNA TÍA os lo explique. 
Soléis pensar que :-), :), =), ;-), ;) es lo mismo pero no. Bueno quizás algunas tienen similitudes, pero NO SIGNIFICAN LO MISMO, en ningún caso.
Lo peor de todo, es que ninguna (bueno, puede que haya una excepción con la 3º) significa lo que parece, que es "estar contento". Estas caras transmiten enfados, más aún que :@
El orden de enfados de estas caritas de menor a mayor grado es el siguiente:
1. :) (puede variar en :D)
2. :-) (puede variar en :-D)
3. ;) (puede variar en ;D)
4. ;-) (puede variar en ;-D) ¡ESTA CARITA ES ENFADO MÁXIMO!

La siguiente carita =) no se incluye, o no la incluyo yo como enfado, debido a la necesitad personal de tener un emoticono que transmita realmente lo que representa, ESTAR CONTENTA.

Bueno, habéis apreciado que existe también una variación de las caritas anteriores. Esas ya dependen de cada chica, pero las dos últimas si se suelen usar para denotar enfado. 

Os voy a poner un ejemplo en el que se pueden usar las caritas anteriores en el que se note, y no el enfado de la chica.

Ejemplos:

- Pues no sé, tu has lo que quieras. :-) (¡PELIGRO!)
- Oh. :))) (Si añade más de un medio paréntesis además lo está haciendo adrede para que os deis cuenta.)
- A mi me da igual. ;-) (¡NO LE DA IGUAL, NO LE DA IGUAL PARA NADA EN ABSOLUTO! Y la vas a pagar.)
- Ya veo. :) (Cuidado, mucho cuidado con lo siguiente que vayas a decir.)

Entonces ya lo entendéis más o menos, ¿no? =) 
Sí, ¡exacto! Esa carita que acabo de poner es de contenta porque lo entendáis. ¡Qué linces sois! 

Pues esto ha sido una mini-parte de mis cursillos sobre entender a las tías. Espero que os sirva de algo, ¡besitos lectorianos!

5 de septiembre de 2012

Corazoncito.

Pasos de gigantes. Seguridad. Contar los miedos. Sentirte libre. Amar como nunca. Bailar sin música. Sentir con el corazón. Ser feliz.


Haberte encontrado.

2 de septiembre de 2012

Entender a las tías en 10 sencillos pasos. Voy para curso del CCC. (Parte I)

Las tías somos simples, no os compliquéis, os voy a dar unas pequeñas lecciones rápidas de "Mujer - Español (tío), Español (tío) - Mujer".

1. Si una tía pregunta algo, es que YA lo sabe, o lo sabe a medias. (O sea que "mentiras" las justas.)
2. Las tías le ponemos TONO (de voz) a todo lo que leemos, y más si es de otra tía a nuestro chico. Por eso para nosotras no es un "hola".
3. No nos vamos 
a engañar, nos gusta que los tíos sean "celosos" con nosotras en cierta medida. Sentirnos PROTEGIDAS.
4. ¡Necesitamos saber que nos queréis, coño!
5. El tono de voz de una tía es muy importante a la hora de hablar. Os ahorrará muchos "no(es)" que son "si(es)" y viceversa.
6. Nunca viene mal un "buenos días princesa".
7. Nos gusta sentirnos deseadas. PERO POR ÉL. Ese ÉL especial.
8. Nos gusta sentirnos especiales por eso si nos llamáis por sorpresa, o nos decís "¡venga, salgamos!". No vamos a decir que no (a ÉL).
9. ¡AMAMOS LOS MIMITOS! (No todo el tiempo, que si no agobia, pero ¡nos encantan!)
10. Las tías tratamos de entenderos (a vosotros) TODO EL TIEMPO. El problema es que pensamos con mentalidad de tía, y no de tío.

Vale, a lo mejor somos un poco complicadas.. ¡pero queremos que nos entendáis! ¡Queremos que ese ÉL especial nos entienda!

Me han abierto los ojos.




29 de agosto de 2012

"Y cualquier día", ya se cumplió.

Sé que cualquier día, cualquier día, te vas a enamorar loca y perdidamente de mi, y aparecerás bajo mi ventana con un tropel de rosas a modo de obsequio y vas a decirme que me quieres para ti, para ti, y para siempre.
Sé que saldré corriendo, saldré corriendo y te besaré.. y las rosas se caerán al suelo, no porque no las quiera, sino porque no hacen falta para nada, en absoluto. Porque me quieres. Y nos daremos un beso, un beso de amor infinito. Un beso fugaz.
Sé que a partir de ahí, a partir de ahí, te pasarás el día entero dándome besitos en la frente, a modo de protección. Y te sentarás tras de mi, abrazarás mi espalda, encontrando tus manos en mi tripita, sujetando las mías, en noches de invierno para que el frío no pueda superar nuestro calor.
Sé que en algún momento, en algún momento, me mirarás y sabré lo que quieres decir, con solo mirarte, sin rozarnos en ningún instante.
Sé que cualquiera de mis locas y románticas creencias, más absurdas aún, ya se han cumplido. No de esta forma al más puro estilo comedia romántica de Hollywood, protagonizada por Jennifer Aniston y Hugh Jackman. Pero sé que se ha cumplido, porque cada vez que te miro, o te veo sin verte, sé que te quiero, que me quieres, que nos querremos para siempre. 



26 de agosto de 2012

Enamorada más aún si cabe.

Voy a cerrar los ojos. Y sé que en algún momento vas a aparecer, y me vas a dar un beso de amor, de estos que salen en las películas de principios de los 60. Y me voy a quedar enamorada. Enamorada para siempre. Enamorada de tus ojos, de tu mirada, de tus labios. Enamorada de cada parte de tu ser. Prendada, hipnotizada, al borde del colapso de amor. 
Quizás no me expliqué bien.. no enamorada para siempre. Enamorada para siempre más aún si cabe.

22 de agosto de 2012

No son versos para nada en absoluto.

Voy a conjurar versos,
escribir canciones,
relatarte mil historias,
buscar excusas para quererte aún más.

Voy a espantar fantasmas,
gritar hasta que amanezca,
nadar bajo la lluvia,
esperarte hasta que anochezca.

Voy a seguir aquí,
escribiendo esto como si fueran versos,
versos que no son,
rimas que no existen.

Voy a continuar buscando la forma de sorprenderte,
de decirte sin gritar,
que te quiero de mi forma rara y extraña,
de mis recursos literarios inventados.

Voy a estar siempre,
para hacerte sonreír,
para enamorarte cada día,
para hacerte feliz.

¿Mariposarios?

Y en ese preciso instante te das cuenta. Desde dentro oyes como tu corazón hace chispitas (¡y no tienes ninguna bengala encendida!), tu tripita se encoje y cientos de mariposas revolotean como si se les fuera la vida en ello. Y lo peor (mejor) aún está por llegar, tu cabeza empieza a visualizar miles de escenas en las que lo incluye. Lo incluye hoy, mañana y siempre. Lo incluye en el último peldaño de tu vida (con banda sonora de fondo), y se pregunta ¿por qué no había aparecido antes?
¡Porque os estabais esperando!
Y ya no puedes pensar en otra cosa. Sabes que es para ti. Quieres que sea para ti. No habrá nadie igual, nadie que haga de tu corazón chispitas de felicidad, ni de tu tripa un ¿mariposario?, ni de tu cabeza un cóctel al más estilo "puke rainbow". Ya nada volverá a ser como antes. Nunca nada fue igual, incluso antes de saber su nombre. 
 

3 de agosto de 2012

Entrada tonta con una decisión irrevocable y absoluta, por lo menos esta noche.

Perdí esa magia al escribir, ese enganche emocional entre lector y escritor, ese toque de originalidad en mis textos, en mis incoherencias y tontunas madrugadas. Perdí ese encanto que desprenden los textos de hace meses, han pasado a segundo plano, y cuando intento escribir algo diferente, acabo hablado de lo mismo, de ti y de mi, y de como me encantas. Y sé que lo sabes. ¿¡Veis a lo que me refiero!?
He decidido volver a escribir, a escribirte, sí a ti como siempre, pero esta vez buenos textos, textos de antes, textos en los que mezcle imaginación, ñoñería y a ti. Porque siempre son a ti, desde que tengo memoria de buenas entradas. Son a ti. Traiste contigo el que escribiera bien. Culpable. Por eso a partir de hoy, decisión irrevocable y absoluta (por lo menos esta noche) he decidido solo escribir entradas que merezcan la pena leer, o entradas raras, para días como hoy. 

Gracias por hacerme escribir bien, y por estas noches raras en las que decido volver a retomar el blog gracias a ti, sin decir nada en absoluto. 

PD: Véase esta como una entrada tonta, en la que no escribo bien y que marcará el comienzo de la "nueva era" del blog. 

Estratosfera.

Se me ocurrió un título y ya..

Tan grande, tan pequeña,

tan llena de incrédulos puntos infinitos,

ella que nos arropa a todos,

que nos hace sentir que pertenecemos a algún sitio,

algún sitio especial, o simplemente un lugar,

ella que soporta todo lo que hacemos,

con ojos de gigantes,

ella tan grande y tan pequeña..

Estratosfera.

27 de julio de 2012

Sandeces a estas horas, y una foto que no tiene nada que ver.

Aprovechando que son las tres de la mañana y no hay muchos gatos por aquí, tras un buen día y descubrir que blogger va modificando su interfaz, a mejor posiblemente, vuelvo una noche cualquiera de verano a escribir en este blog que parece olvidado. 
Sé que ultimamente escribo como una p*ta mi*rda, pero es que no me salen las palabras. No tengo ni quiero tiempo para escribir, y de las pocas cosas que echo de menos es de la forma de mi prosa, aunque sea en un blog. Mi blog.
Definiendo lo anterior como un conjunto de sandeces inecesarias a estas horas, adjunto una foto, una frase final e intento dormir. 


Aquí mi frase final (sí la tengo que indicar):

Buenas noches princesito. 

14 de julio de 2012

Dreams come true.

¿Y si hablamos de sueños, de sueños cumplidos, de sueños encontrados, de sueños buscados, de sueños conseguidos..? Pues yo hablaría de ti, sin dudarlo ni un solo momento. 


13 de julio de 2012

Mi.

Y de repente un día naces. Sin previo aviso (bueno, quizás un poco). Y te sacan de esa bolsa taaaaaaan cómoda en la que solo dormías y comías, y te traen a un mundo en el que las personas son ilegales dependiendo de que tierra pisen, sin saber si quiera si podrás hacer la vida que quieres, o si tendrás derecho a elegir. Porque no lo sabes. Eres una persona al azar entre mil, menos que eso, un espermatozoide con suerte, y sin ofender.
Pero de repente un día abres los ojos, y ya tienes 17 años, y estás apunto de la mayoría de edad. De hacer "lo que quieras" o más que eso, de ser responsable de todo lo que haces. Ya no vas a depender de nadie, y con suerte estás en una familia de clase media y puedes permitirte caprichos. Y viajar, y conocer gente, irte, volver, hacer tu vida.
Los años pasan, y esos 17 son casi 22 de un día para otro. Y de repente, encuentras a alguien. Y parece que si esos años que tienes se han ido volando, estos sean aún más rápidos. Casi 22 son casi 23, y ella sigue ahí, sin pedir nada a cambio, porque lo único que necesita de ti, es (simplemente) a ti. A ese gafitas, a ese de risa simpática. Y ella sabe que te puede llamar amor, porque en realidad es eso, ¿no? Desde que naces, estás buscando a alguien que te quiera, sin saber lo que es querer. Sin saber lo que es amor, pero necesitas a alguien. Te haces grande, e intentas entenderlo como una reacción, como algo esporádico, o no. Intentas darle explicación a algo que no lo tiene (aunque se estudie nuestro cerebro, que yo sé que "todo" es ciencia, pero hay veces, en la que esa inmensidad que aguarda el "todo" no se puede explicar). Y tardas casi 23 años, en querer, aunque sea un fizquito. Pero, ya tienes lo más difícil, de alguna manera, ¿no? Que alguien totalmente ajeno a ti, alguien que conociste de casualidad, alguien que "no te tiene que querer" porque es eso, alguien externo, en cuanto a familia, y amigos de siempre, te quiera. Tienes a alguien que te quiere. ¿No es bonito? Por lo menos, por lo menos, de aquí al cielo de bonito, o.. a tres metros sobre el cielo, pero bueno, dejando a Federico Moccia a parte, aunque mantengo ese "bonito", es algo sublime, perfecto, inexplicable. 
Amor, no es decir treinta mil veces te quiero al día (bueno para mi sí), amor es aún estando de mal humor echar una sonrisa porque ella lo está intentando, te está buscando, aunque ya te ha encontrado desde hace mucho tiempo. Amor no es "dejar que se le pase lo que tenga", amor es que se preocupe por ti sin decirlo, sin preguntarlo, amor es intentar entenderte, y si es necesario hablar contigo, y expresarte. Amor es no tener miedo a nada, y tenerle miedo a todo a la vez. El amor, es lo más subjetivo del mundo, amor es lo que ella, después de que la enamorarás con la primera sonrisa, siente por ti. Amor eres tú. Tu eres su amor. Mi amor. (Porque sí, porque sabes que hablo en tercera persona, siendo yo.) Amor, es no tener miedo a decir te quiero, ni a sentirlo. 

Y casi un año después me levanto y aún pienso en la primera vez que te vi sonreír y se me ponen los pelos de punta. Y casi un año después aún cuando te acercas para darme un beso, si estoy desprevenida, o te quedas justo ahí, tan cerca, todavía me pongo nerviosa. Me pones nerviosa. Y así podría seguir diciendo cosas de aquí al infinito, y no cansarme, y sin parar de amarte. ¿Hace falta que diga te quiero? Yo creo que sin decirlo, está mil veces en esta entrada, en este blog, en tu vida, en mi vida, en TU corazón.


7 de julio de 2012

De lo que escribo y después no sé seguir.


Por estúpido que parezca lo último que quería gritarle era “te quiero” para saber si ella lo hacía también. Para saber si lo quería también. Rompió a llorar. Ella.
- Pero dime que me quieres, por favor.
- No si tu no lo haces primero.
- ¿Qué si te quiero? ¿Aún lo dudas?
- ¿De verdad?
- Te quiero de aquí a la luna, de aquí a Marte, de aquí al infinito. Te quiero incluso cuando te enfadas sin sentido. Te quiero desde el primer momento en que me miraste y sonreíste, y estuve como una estúpida hablando todo el día del chico de la sonrisa encantadora. Te quiero aunque no te lo diga, por miedo a que no lo hagas tú. - Hizo una pausa de esas que no sabes si acabarán, lo abrazó y prosiguió. - Y ahora dime, ¿me quieres?
- ¿De veras piensas que después de esto hace falta que te lo diga? Por supuesto que no te quiero, te amo. Nunca pensé decirle esto a nadie, a ninguna, pero llegaste tú y me rompiste por completo. Yo chico formal y tímido, enamorado de la persona más loca y espectacular del mundo. Enamorado de ti.